Me encanta que haya sido capaz de abrirse así para compartir con nosotros sus experiencias alrededor de su padre destacando los problemas al igual que lo positivo.
Muchos crecimos con conductas aprendidas de nuestros padres que puede que no sean las más sanas, depende de nosotros mismos el intentar crecer como personas dejando eso atrás.
Espero que esté bien.
Esos iempos de antes, Gabriela, donde el amor y el respeto hacían inseparable junta de valores. Gracias por el comentario muy acertado al respecto.