Hola amigos de #hive y de #holos-lotus espero que estén de maravillas, este es siempre mi deseo para todos los miembros de nuestra comunidad.

Hoy vengo a hablarles sobre un problema que muchas personas enfrentan en algún momento de sus vidas y que es más frecuente de lo que imaginamos, la baja autoestima. Sentimiento que puede surgir por diversas razones, como malas experiencias pasadas, comparaciones sociales inadecuadas, críticas externas o incluso la forma en que nos percibimos a nosotros mismos, pero les cuento que es posible trabajar en nuestra autoestima y encontrar formas de mejorar nuestra vida desde diferentes perspectivas: psicológica, espiritual y social.

El aspecto psicológico es el más importante, lo principal es aceptarse y quererse uno mismo; es fundamental reconocer y comprender las raíces de nuestra baja autoestima. Existen terapia cognitivo-conductuales (TCC) que vienen siendo herramientas efectivas para ayudar a identificar pensamientos negativos y patrones de comportamiento que alimentan esta sensación. A través de la TCC, podemos aprender a desafiar creencias limitantes y reemplazarlas por afirmaciones más positivas y realistas. Pongo un ejemplo, si un pensamiento recurrente es "no soy lo suficientemente bueno", podemos trabajar en reformularlo a "estoy en constante aprendizaje y crecimiento". Al cambiar la perspectiva no solo mejora nuestra autoimagen, sino que también nos empodera para enfrentar desafíos con mayor confianza.

La práctica del autoconocimiento es esencial. Dedicar tiempo a reflexionar sobre nuestras fortalezas, habilidades y logros puede ser una forma poderosa de contrarrestar la baja autoestima. Hacer una lista de nuestras cualidades positivas y recordar momentos en los que hemos superado dificultades puede ayudarnos a vernos desde un punto más favorable. Este ejercicio no solo nos permite reconocer nuestro valor interior, sino que también nos permite desarrollar una mentalidad más resistente.

La meditación y la atención plena pueden ser herramientas valiosas para cultivar una autoestima saludable. La primera nos invita a estar presentes en el momento y a observar nuestros pensamientos sin juzgarlos. Al practicar la atención plena, aprendemos a separar nuestra identidad de nuestras inseguridades y a aceptar nuestra humanidad, estas influyen desde la espiritualidad.

Esto no significa ignorar nuestras debilidades, sino más bien abrazarlas como parte del viaje de crecimiento personal. La espiritualidad también nos puede conectar con algo más grande que nosotros mismos, lo que puede aportar un sentido de propósito y pertenencia que contrarresta la sensación de insuficiencia.

Agradecer es una práctica espiritual que tiene un impacto positivo en nuestra autoestima. Tomarse un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las cuales estamos agradecidos puede cambiar nuestra perspectiva sobre la vida. En lugar de enfocarnos en lo que nos falta o en lo que no hemos logrado, comenzamos a apreciar lo que ya tenemos. Este cambio de enfoque puede ser transformador y ayudarnos a desarrollar una mentalidad más positiva.

Las relaciones interpersonales influyen tambien grandemente, buscar amistades de buen corazón es primordial, rodearnos de personas que nos apoyan y valoran es crucial para mejorar nuestra autoestima, aquí entra el factor social. Las relaciones saludables fomentan un sentido de pertenencia y nos recuerdan nuestro valor. Es necesario aprender a establecer límites con aquellas personas que pueden contribuir a nuestra baja autoestima, ya sea a través de críticas constantes o comparaciones poco saludables. Al mismo tiempo, buscar comunidades o grupos donde podamos compartir experiencias y recibir apoyo puede ser un paso significativo hacia la mejora personal, por ejemplo recomiendo ingresar a @Holos-Lotus.

Participar en actividades sociales que nos apasionen también puede ser un antídoto contra la baja autoestima. Ya sea unirse a un club de lectura, practicar un deporte o participar en actividades artísticas, experiencias que no solo enriquecen nuestras vidas, sino que también nos permiten conocer a personas afines y construir conexiones significativas.

Es esencial recordar que el camino hacia una autoestima saludable no es lineal. Habrá días buenos y días malos, pero lo importante es ser compasivos con nosotros mismos en cada paso del proceso. Cada avance cuenta por pequeño que sea y merece ser celebrado. Al mirar hacia otro lado y enfocarnos en el crecimiento personal desde una perspectiva psicológica, espiritual y social, podemos transformar nuestra relación con nosotros mismos y construir una vida más plena y significativa.

Espero les sirva para enfrentar la vida o para ayudar a algún ser querido y por favor me dejan sus comentarios y experiencias con respecto al tema.

Las fotos son de mi propiedad

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Hello friends of #hive and #holos-lotus I hope you are doing great, this is always my wish for all members of our community.

Today I come to talk to you about a problem that many people face at some point in their lives and that is more common than we imagine, low self-esteem. A feeling that can arise for various reasons, such as bad past experiences, inappropriate social comparisons, external criticism or even the way we perceive ourselves, but I tell you that it is possible to work on our self-esteem and find ways to improve our lives from different perspectives: psychological, spiritual and social.

The psychological aspect is the most important, the main thing is to accept and love yourself; It is essential to recognize and understand the roots of our low self-esteem. There are cognitive-behavioral therapies (CBT) that have been effective tools to help identify negative thoughts and behavior patterns that feed this feeling. Through CBT, we can learn to challenge limiting beliefs and replace them with more positive and realistic affirmations. For example, if a recurring thought is "I'm not good enough," we can work on reframing it to "I'm constantly learning and growing." Changing our perspective not only improves our self-image, but also empowers us to face challenges with greater confidence.

The practice of self-awareness is essential. Taking time to reflect on our strengths, abilities, and accomplishments can be a powerful way to counteract low self-esteem. Making a list of our positive qualities and recalling times when we have overcome difficulties can help us see ourselves in a more favorable light. This exercise not only allows us to recognize our inner worth, but also allows us to develop a more resilient mindset.

Meditation and mindfulness can be valuable tools for cultivating healthy self-esteem. The former invites us to be present in the moment and observe our thoughts without judging them. By practicing mindfulness, we learn to separate our identity from our insecurities and to accept our humanity, both of which are influenced by spirituality.

This doesn't mean ignoring our weaknesses, but rather embracing them as part of the journey of personal growth. Spirituality can also connect us to something bigger than ourselves, which can bring a sense of purpose and belonging that counteracts the feeling of inadequacy.

Giving thanks is a spiritual practice that has a positive impact on our self-esteem. Taking a moment each day to reflect on the things we are grateful for can change our perspective on life. Instead of focusing on what we lack or what we haven't achieved, we begin to appreciate what we already have. This change of focus can be transformative and help us develop a more positive mindset.

Interpersonal relationships also have a great influence. Seeking good-hearted friendships is paramount. Surrounding ourselves with people who support and value us is crucial to improving our self-esteem, and this is where the social factor comes in. Healthy relationships foster a sense of belonging and remind us of our worth. It is necessary to learn to set boundaries with those people who can contribute to our low self-esteem, whether through constant criticism or unhealthy comparisons. At the same time, seeking out communities or groups where we can share experiences and receive support can be a significant step towards personal improvement. For example, I recommend joining @Holos-Lotus.

Participating in social activities that we are passionate about can also be an antidote to low self-esteem. Whether it's joining a book club, playing a sport, or participating in artistic activities, experiences that not only enrich our lives but also allow us to meet like-minded people and build meaningful connections.

It's essential to remember that the path to healthy self-esteem is not linear. There will be good days and bad days, but the important thing is to be compassionate with ourselves at every step of the process. Every step counts, no matter how small, and deserves to be celebrated. By looking away and focusing on personal growth from a psychological, spiritual, and social perspective, we can transform our relationship with ourselves and build a fuller, more meaningful life.

I hope it helps you cope with life or help a loved one. Please leave me your comments and experiences on the subject.