Allí está el meollo del asunto, como el adulto cree que eso es bueno y lo entrega a los niños. Hasta las estrellitas que se ven tan inocentes se vuelven peligrosas.
Dios te bendiga, hija.
Allí está el meollo del asunto, como el adulto cree que eso es bueno y lo entrega a los niños. Hasta las estrellitas que se ven tan inocentes se vuelven peligrosas.
Dios te bendiga, hija.