Reflexiones (in)necesarias 092: "Nunca sabemos lo poco que sabemos", por bonzopoe

Estoy leyendo el libro 'La sicología del dinero' de Morgan Housel, y me ha llamado mucho la atención un ejemplo que ha dado para explicar lo poco que sabemos sobre lo que no sabemos, o sea que en realidad sabemos mucho menos de lo que imaginamos, pero tenemos la idea de que sabemos mucho más.

Me gusta por ser muy didáctico y ser, a mi modo de verlo, una manera muy inteligente de hacernos ver que no somos tan inteligentes como pensamos que lo somos. El pone de ejemplo a su hija pequeña, y como ella ve el mundo con toda la lógica del mundo, según ella y lo poco que sabe, y como su limitado marco de referencia le sirve para encontrar una explicación a todo lo que le pasa.

Luego de que nos hace cabecear afirmativa, y hasta empáticamente, al explicarnos su argumento con el tierno ejemplo de su hija, nos hace ver que todos somos como su hija. Vivimos en un mundo muy complejo, lleno de variantes fuera de nuestros control, pero con nuestro limitado conocimiento creemos que lo entendemos todo, solo porque con nuestro limitado marco de referencia somos capaces de encontrar explicaciones casi a lo que sea.

Si en realidad somos como la hija de Housel, y creo que ese es el caso, somos todos unos ilusos sin saberlo, y creemos entender el mundo y nuestras vida, cuando en realidad no tenemos ni idea de nada, y hemos tenido la suerte de que la vida nos ha tratado bien y nuestras explicaciones no se han alejado estadísticamente demasiado de la realidad.

Y es que, a pesar de lo que muchos creen, es imposible considerar todas las variables que existen al tratar de tomar decisiones y/o entender el mundo que nos rodea. El impacto de hechos aparentemente irrelevantes en nuestra vida puede ser brutal, y que mejor prueba de ello que la pandemia del Covid-19 que acabamos de dejar atrás.

Al principio nadie se preocupó porque era algo que sucedía en China, y cuando se expandió nadie pensó que duraría mucho, y al final nos tuvo encerrados prácticamente dos años. Nada de lo que sabíamos nos permitió prever lo difícil que sería para el planeta esa extraña enfermedad que empezó en China y todo mundo subestimó.

O si hablamos de un ejemplo más reciente, veamos el caso de Donald Trump, que ha puesto a temblar al mundo y todavía no toma posesión como presidente. Si la bala que le rozó la oreja en el atentado que sufrió cuando estaba en campaña, hubiera estado un par de centímetros más a la derecha, Trump probablemente estaría el día de hoy 3 metros bajo tierra, y no estaríamos tan preocupados.

¿Porqué la bala no dio en el blanco? Hay mil variantes que considerar, así que es difícil saberlo, pero podemos ser simplistas y atribuirlo a la suerte, un cambio en la velocidad del aire, o algo similar, pero la verdad es que nunca lo sabremos y solo estaríamos especulando.

Bueno, pues así dirigimos nuestra vida, a partir de una especulación tras otra; y una demasiado aventurada puede ser suficiente para acabar con nuestra realidad, con nuestra vida. Sin embargo nadie piensa en esto, y tal vez sea mejor así, porque probablemente la angustia nos paralizaría.

La realidad es que andamos a tientas en un mundo que nos rebasa completamente. Pero, como dicen por ahí, la ignorancia da tranquilidad, y ese es nuestro caso. El no saber que caminamos entre cuchillos nos permite hacerlo con tranquilidad, incluso seguridad, sin saber que un descuido, que tal vez ni sea culpa nuestra, puede arruinarnos todo.

Por eso considero que la humildad es una de las mayores virtudes, porque nos ayuda a ser prudentes y siempre reconocer nuestras limitaciones y debilidades, y actuar acorde a ellas. No está mal saber poco, lo malo es conformarse con ello y no querer saber más, y peor aún es el pretender que ya sabemos suficiente, o lo sabemos todo, cuando en realidad no sabemos casi nada.

Seamos más humildes y agradecidos por lo mucho o poco que tenemos. Si estás pensando en tus propósitos de año nuevo, aquí tienes una opción que seguramente enriquecerá tu vida y tus relaciones; ya verás que nunca se sabe lo suficiente, y nunca se deja de aprender. Muchas gracias por leerme y hasta la próxima.

Si llegaste hasta acá muchas gracias por leer este publicación y dedicarme un momento de tu tiempo. Hasta la próxima y recuerda que se vale dejar comentarios.