Al morir se desvanece todo o puede que sólo se desvanezca el velo de ilusión, que algunas filosofías consideran que es esta vida, en realidad. El péndulo viene a ser como una espada de Damocles, que se cierne constantemente sobre nuestras cabezas. O ese reloj, que nunca detiene sus horas y que a cada minuto nos acerca más y más hacia el desenlace. Por eso, una antigua máxima romana decía aquello de vive el momento como si fuera el último. Saludos