Hola amigos de Hive

Espero que se encuentren súper bien. Quiero empezar este post contándoles un poco de cómo el estrés se está apoderando de mi vida, de cómo ha sido la causa principal de muchas cosas que me están ocurriendo, tanto en mi mente como en mi cuerpo. Todo se está reflejando: todo lo que pienso día a día se está reflejando en mi cuerpo y en cada cosa que hago. Han sido semanas difíciles en las que he tenido que decir que ya basta, en las que he tenido que ponerme a pensar un poco en mí, ya que nunca lo hago. De detenerme y recordarme que yo estaba en un proceso de amor propio y crecimiento personal, el cual simplemente olvidé porque tenía demasiada carga mental y me volví a abandonar

Darme cuenta de esto es entender que el amor propio también es reconocer que no estás bien, que necesitas ayuda, que necesitas cambiar, que necesitas mejorar todo y salir de la zona de confort. No me he sentido bien y se los he mencionado en otros posts, pero hoy quiero liberar un poco de esto que siento haciendo una carta al estrés, una carta para empezar a dejarlo ir, empezar a centrarme en que hay cosas que no puedo cambiar y que no puedo tener el control de todo, así que hice esta carta para drenar un poco este sentimiento, del estrés que parece ser una carga muy pesada en mi espalda que cada vez está teniendo más peso y se me es imposible cargarlo más, así que lo hice para desahogarme.

Querido estrés, no te pido que te vayas por completo de mi vida porque realmente, a veces siento que es necesario tenerte cerca para estar al tanto de cómo marcha mi vida en sentido laboral y como mamá, pero te pido que dejes de ser una carga tan grande. Te pido que me permitas respirar cuando lo necesito, que me permitas descansar. No pienses que terminaré todo tan rápido como piensas, merezco tener una pausa y calmarme. Sé que debo hacer miles de cosas en el día y las voy a hacer, solo que no lo recuerdes cada cinco minutos y me hagas sentir como si no lo lograre, todo con calma por favor. Estás enfermándome, no me he sentido bien y aún sigo sin descansar ni un solo minuto, estás llenándome de preocupaciones tan grandes que ahora, junto a la ansiedad, quieres unirte para rebotar en mi cabeza y hacerme sentir como si mi mundo se fuera a caer a pedazos solo por no cumplir a tiempo una tarea o actividad. Estrés, necesito respirar, no te pido que te vayas, solo pido que no peses tanto en mi espalda.

Gracias, queridos amigos, por permitirme desahogarme con ustedes y mostrarles cada parte de mi vida y mi corazón. Estoy muy emocionada por continuar aquí en mi casa de Hive donde he aprendido mucho y aún me queda mucho por seguir. Gracias, espero les haya gustado y, como siempre, un beso. Nos vemos en una próxima publicación.