Sydney Mclaughlin -Levrone cruza la meta olimpica e los 400mv / Foto: World Athletic
La imagen de Sydney Mclaughlin -Levrone cruzando la meta en París es reveladora. En solitario, lanza su cuerpo sobre la línea meta para remover los cimientos de la historia.
Arranca titulares y se lleva consigo las palabras. Llevo miles de minutos intentando rescatar letras de entre un remolino de emociones.
En sus ojos habita aquella niña que no daba crédito a la ilusión de sostener con sus manos la banderilla que simboliza la consecución del cupo olímpico en Estados Unidos. Ocho años después, los que no damos crédito a lo que vemos somos nosotros. Tiene el mundo a sus pies, y lo ha hecho, solo, con la magia que brota de sus piernas.
A París fue en busca de algo grande. Ya nos ha mal acostumbrado a esperarlo siempre.
Ustedes pueden revisar su historial, no hay un solo Campeonato en el que no mejore3 aquí con 52.13, el mejor tiempo hecho en semifinales en toda la historia de esta distancia, era un presagio.
A la altura de los 250 metros ya no había nadie en su entorno. La que más se le acercó fue Femke Bol, a 0.14 segundos en la quinta valla.
Otro viaje el solitario para Sydney Mclaughlin -Levrone que ya no corre contra el mundo, ni contra Bol,...corre contra el tiempo, contra los límites y contra si misma.
De punta a cabo, hizo su trabajo a cabalidad. Y mientras el mundo se rinde ante su perfección, ella se permite revelar que esperaba un poco menos de tiempo en el reloj. Imagínense.
Hasta cuándo y hasta dónde podrá llegar, posiblemente ni ella lo sabe. Cómo tampoco tiene claro qué hará en las próximas temporadas. 'Solo sé que hoy es jueves, y mañana viernes', dijo.
Sydney Mclaughlin -Levrone es la campeona olímpica de los 400m con vallas.
Retiene su título, y destroza su propio récord del mundo que era de 50.65.
¡50.37 segundos! ha corrido en el Stade de France.
¡50.37 segundos en 400M CON VALLAS.
¡50.37 segundos para firmar el sexto record mundial de su carrera.
¡50.37 estratoféricos segundos!
Y yo que soy de creer en las utopía, hasta lo siento por Bol, que es una atleta exquisita, pero lo extraordinario merece todas las reverencias. Por Sydney yo no aposté ayer, ni siquiera hace tres temporadas cuando ganó en Tokio. Lo hice desde que la descubrí, con sus casi 17 años alcanzando la utopía de hacer equipo olímpico individual en los Estados Unidos. Por ello me permito el regocijo al tener razón sobre su supremacía, y celebrar su 'anormalidad' sin cargos de conciencia .
Sydney Mclaughlin -Levrone tiene un don, y gracias a Dios, ha asumido con vehemencia la responsabilidad de cultivarlo.
Long Life to The Queen!
Spoiler: Póngale la vista al parcial que hará para cerrar la victoria -creo yo - del relevo 4x400m estadounidense.
Esta es mi atleta favorita y, después de Armando Duplantis sabía que era el oro más seguro del atletismo. Lo que yo sí esperaba un mejor tiempo porque pensaba que Femke Bol le haría resistencia, pero no.
Lástima que no corra los 400 planos, estoy seguro que el 47.60 de Marita Koch dejaría de existir.
Gracias por compartir esta excelente publicación.
Feliz viernes.
Salud y saludos.