El placer de disfrutar de una comida favorita no tiene horario ni fecha en el calendario. La única limitante puede ser tener disponible todos los ingredientes para poder elaborarlo como en el caso de las hallacas, pero esto no fue problema para saciar mi antojo.

En Venezuela la hallaca es un plato tradicional de la cena de navidad y noche vieja. En realidad se comen todo el mes de Diciembre hasta a veces mediados de Enero. ¿Y cómo no hacerlo? si este plato es una delicia. Para los que aún no conocen la hallaca, esta es una preparación que consiste en un pastel de masa de maíz que está relleno con carne de res guisada envuelto en hoja de plátano. Es la excusa perfecta para reunir a la familia para elaborarlas juntos como si se tratara de un ritual de amor a nuestros antepasados y tradiciones.

Por suerte hay algunas variantes de esta delicia como son los bollos. Si no tienes mucho tiempo, puedes elaborarlos sin mucha complicación y no llevan tantos ingredientes como la hallaca. Sin embargo debo acalarar que existen varias clases de bollos. Están los bollos pelones, conocidos también como hallaquitas. Son muy simples ya que se elaboran con harina de maíz blanco, agua y sal. Se cocinan envueltos en hojas de maíz seco. A partir de esta receta se pueden hacer variantes como los bollitos aliñados, bollitos de chicharrón, bollitos rellenos con pollo guisado y deshebrado o de carne molida.

¿Por qué les cuento todo esto? Es porque hoy preparé un híbrido, es decir quería realizar unos bollitos para tenerlos para mis desayunos pero a la vez quería envolverlos en las tradicionales hojas de plátano como las hallacas pero al mismo tiempo quería que el relleno fuese abundante y no mezclado con la masa como los tradicionales bollos de navidad 😁😋, por eso bauticé a esta receta como "mini hallacas de pollo" y ya verás el por qué.

Los desayunos a veces se tornan aburridos, pero si dispones de un poco de tiempo puedes realizar cosas maravillosas que puedes mantener en el refrigerador o congelar, de esta forma tendrás a mano una preparación diferente y deliciosa para cada día.

Para hacer estas "mini hallacas de pollo" primero debes hacer un guiso de pollo deshebrado que yo llamo "multi uso" ya que me sirve pora hacer varias preparaciones como la deliciosa polvorosa de pollo, empanada gallega, empanadas fritas de harina de maíz o los famosos "pastelitos de pollo". Por eso cuando hago este guiso preparo una buena cantidad, una parte la utilizo y la restante la congelo.

• Coloca a cocinar las pechugas de pollo en agua con 1 cucharadita de sal, media cebolla y un trozo de pimentón. Una vez cocidas las pechugas de pollo retíralas del caldo y deja enfriar.

• Cuando estén frías las pechugas cocidas, procede a deshilachar su carne o deshebrar en finas tiras. Reserva en un envase.

• Lava bien los vegetales y corta en cuadritos la cebolla, el ají dulce, el pimentón y las hojas verdes del ajoporro.

• En un sartén calienta el aceite y agrega los 3 dientes de ajo machados. Vierte los vegetales y sofríelos hasta que su textura sea blanda.

• Agrega el pollo previamente deshebrado y añade media taza del caldo donde se cocinaron las pechugas. Remueve bien y rectifica la sal y pimienta.