Instruye al niño en el camino correcto y aún en su vejez no lo abandonará.
Desde que somos pequeños nuestros padres siempre nos corrigen, aunque a veces queremos hacer la nuestra y en ocasiones nos desviamos sin importar la edad que tengamos siempre la palabra de Dios siempre nos trae a memoria todas esas correcciones .
La vida es como el ajedrez, antes de mover una pieza tenés que pedirle q Dios la dirrección correcta, porque cada desicion que tomes te puede llevar a ganar o a perder y una vez tomada esa desicion no hay marcha atrás. Por eso, analiza pero sobre todo se consciente que cada acción tiene una consecuencia buena o mala pero la tiene