Tras haberse presentado el Dr. Harry mira levemente por la ventana de la carreta y saca su reloj de bolsillo para ver la hora. La preocupación en su rostro se hace cada vez más evidente con cada minuto que pasa y como tratando de distraer la mente continúa charlando con Alan.
-Encantado de conocerte Alan… respecto a la pregunta de hace rato, normalmente nos turnamos el sillón mi aprendiz y yo, de esa forma uno puede descansar mientras el otro trabaja o conduce la carreta… Y hablando de mi aprendiz ya me estoy empezando a preocupar, el bosque es peligroso de noche y pronto va a comenzar a oscurecer.
Solo entonces Alan se percata que ciertamente ha pasado un buen rato desde que encontró la carreta y entre charlar con Harry y curiosear en la carreta termino volando el día. Ve por un momento hacia el bosque y le recuerda mucho a los alrededores de su pueblo natal, por lo que no se explica como un lugar tan encantador podría llegar a ser peligroso.
-Peligroso? por favor lo peor que se puede encontrar uno en un bosque es un oso y si lo pensamos un poco solo arranque la carreta y atropella lo que sea con ella.
Harry pasa a un semblante más serio y señalando una de las cajas en la carreta responde.
-Hecha tu mismo un vistazo, son piezas de distintas criaturas que utilizamos en este taller para forjar distintos instrumentos de trabajo y algunas de esas criaturas son particularmente peligrosas.
Alan echa un vistazo rápidamente a la caja y queda asombrado por la cantidad de partes allí adentro. Desde garras y uñas de distintas formas, pasando por colmillos y pieles extrañas, hasta llegar a peculiares objetos que no sabría como distinguir pero que emiten un fuerte olor.
-Wow… no le saldría mejor en vez de científico ser cazador? estas cosas son increibles jamas habia visto muchas de estas cosas en mi vida.
Finalmente, y antes de que Alan o Harry puedan continuar con su tranquila conversa, se escucha un fuerte estruendo en el bosque y la carreta es sacudida levemente. Ambos por instinto se ponen a cubierto y tras pasar la sacudida se asoman por la ventana.
-Pero que? A su aprendiz le gusta explotar cosas profesor? Me recuerda a cierto loco de mi pueblo que solo puede hacer cosas Kamikaze.
Dijo Alan, a lo que el Dr. Harry visiblemente perturbado al ver en la ventana como los animales del bosque corrían y humo emergía de las profundidades del mismo contesto.
-Malas noticias mi joven amigo… muy malas noticias.
Harry se apresura a tomar algunos artilugios de la carreta, se los guarda en donde puede dentro de su traje y antes de salir de la carreta apresuradamente, le entrega a Alan un libro. Mientras se disponía a salir finalmente le dice.
-Aprendete el contenido de ese libro tan pronto como puedas, son las instrucciones sobre cómo manejar la carreta y si la cosa allá afuera está tan mal como creo… Vamos a necesitar que este todo listo para huir muy rapidamente.