Quizás diré dos cosas que suenan muy trilladadas a estas alturas, pero precisamente a estas alturas de la vida todavía hay gente que no entiende que atraen a las personas que atraen en su vida, porque están en la misma vibración, y hay algo que tienen que trabajar por dentro.
Lo primero, nadie puede dar de lo que no tiene, esto aplica al amor, al dinero, al conocimiento, a todo lo que pueda ser poseído por nosotros. Y como nadie puede dar de lo que no tiene, si queremos poder aportar ese algo, primero tenemos que cultivarlo en nosotros mismos.
Y lo segundo, ya que nadie puede dar de lo que no tiene, también es una gran verdad que siempre se recibe de lo que damos. Si damos amor, recibimos amor, si damos odio, eso es lo que recibimos, y así va con todo lo que aportemos. Estas dos cosas van muy conectadas, por lo que hay que tener cuidado con lo que cultivamos en nosotros, si lo que realmente queremos es atraer a las personas que más nos interesan a nuestras vidas.
Es solo cuestión de ser coherente con lo que deseamos y actuar a favor de nuestros deseos.