Un partido de fútbol es como una reproducción "saludable" de una guerra. Estás rodeado de un grupo de compañeros y buscarás por todos los medios derrotar al rival, demostrar que eres más fuerte, más rápido, más resistente y más habilidoso con la pelota. Es cuestión de orgullo, honor y de superar lo que se coloque al frente. Hay que estar dentro de la cancha así sea la de tu barrio para entender lo que siente estar ahí, ver al rival a los ojos y desafiarlo, no puedo ni imaginar lo que se debe sentir dentro de un estadio con 70000 personas gritando, impresionante.