Fuente
Jesús sana a un ciego de nacimiento. Juan 9:1-3
1 Al pasar Jesús, vio a un hombre ciego de nacimiento.
2 Y le preguntaron sus discípulos, diciendo: Rabí, ¿quién pecó, éste o sus padres, para que haya nacido ciego?
3 Respondió Jesús: No es que pecó éste, ni sus padres, sino para que las obras de Dios se manifiesten en él.
Esta es una de mis historias favoritas del libro de Juan, Cada vez que leo esta historia en mi rostro se dibuja una sonrisa, al ver la bondad de Jesús, Su misericordia y la forma peculiar en que misteriosamente obra en la vida de los seres humanos.
Pensar que el sufrimiento viene a causa del pecado, bien sea personal o pecado de otros, suele ser tentador y mas aun cuando se trata de darle un veredicto final a alguien. Era muy fácil para los fariseos pensar en que este hombre era ciego de nacimiento debido a algún pecado del pasado o maldición.
Pero es justo alli donde entra en escenario la grandeza de Jesus... El siempre viene a romper nuestros esquemas mentales, humanos y finitos. Y a algo que parecer ser un misterio, El provee una sabia y sencilla respuesta! Jesus corrige esa popular nocion de que el sufrimiento viene por un pecado detrminado. Ese hombre sanado se convirtio en un leal seguidor de Cristo. Sin embargo los fariseos no podian entender este suceso ya que su ceguera espiritual no les permitia ver!