Tejados que cubren las vergüenzas
como vestiduras al desnudo.
Vergüenza ajena que se erije
en lo más alto de los cimientos.
Autopistas para felinos
que habitan al borde del abismo.
Paraguas de cemento,
sombreros protectores de ideas difusas y confusas.
Cóncavo para humanos,
convexo para aves en su lecho perdurable...
Inspiración para poetas y enamorados desamparados
empeñados en forzar lo imposible.
Texto y fotografías de mi autoría.