Ser madre es lo más maravilloso del mundo, siempre y cuando se tenga consciencia de que ese hijo o hija que vas a traer al mundo no es tuyo, de tu propiedad, como el que adquiere y compra una casa, un mueble, o un automóvil, sino tener claro que es una persona que ha venido al mundo a través de ti y gracias a ti y a su padre, pero que como toda persona nace libre y con el derecho de seguir siéndolo. Muchas madres sin ser conscientes de ello manejan a sus hijos como esclavos emocionales, justificándose en que es lo mejor para ellos y que lo hacen por su bien, nada más lejos de esta buena intención existe una oscura pretensión egoísta muy escondida, tanto que a veces ni la madre tóxica es consciente de ello, pero otras veces sí.
En terapia llamamos madres tóxica a aquella que actúa en los dos extremos del afecto hacia su hijo o hija: la madre sobreprotectora o la madre ausente. Y da igual en cuál de los dos extremos esté la madre, porque es igualmente tóxica ya que merma y anula las capacidades de su hijo o hija convocándole una castración emocional que va a limitar su crecimiento, sus relaciones con su entorno, sus relaciones de trabajo, su autonomía, y todas las áreas de su vida adulta.
A continuación destaco 2 tipos de madres tóxicas:
1- Las madres ausentes: son las más fáciles de detectar porque sencillamente no están cuando al hijo o hija en edad aun temprana les hace falta. O bien porque han fallecido, porque están enfermas y no pueden darle esas atenciones a sus hijos aunque lo deseen, porque han abandonado literalmente al hijo o hija, porque están todo el día trabajando, porque son adictas a alguna droga y están todo el día en su mundo o porque no les gusta la maternidad, entre otros, da igual el motivo, la cuestión es que hay una ausencia emocional, una carencia afectiva que automáticamente va a crear en ambos una codependencia, es decir, el hijo o hija va a perseguir emocionalmente a su madre y a exigirle la atención, protección, amor, caricias, valoración, reconocimiento, entre otros...Si no a ella, a “dobles” de ella (parejas y amistades que elige inconscientemente que tienen similitudes y cargas emocionales parecidas a las de su madre, como ir buscando a “mamá” en otras personas con las que se relaciona).
El hijo o hija puede ser que busque a mamá incesantemente exigiéndole cariño y protección o puede ser que le cause un rechazo tremendo y huya de ella y de las personas que sean su doble. Al igual que la madre puede ser que siga huyendo de su hijo o hija y rechazando a personas dobles de su hijo o hija o que de repente quiera recuperar el tiempo perdido y subsanar sus errores y “acose” al hijo y éste sumido en el rencor huya de ella. Un drama, lo mires por donde lo mires.
Esto sucederá mientras el trauma emocional persista, pero una vez que se acude a una sesión de Bioneuroemoción esto comienza a sanarse por completo. Aunque hay que estar dispuesto a remover todo esto y tomar consciencia, para liberar rápidamente a la madre y al hijo o hija de este calvario cortando esa toxicidad que les une, para que sólo reine el amor y la libertad entre ambos.
2- La madre sobreprotectora: la madre sobreprotectora a veces es muy fácil de reconocer por su actitud egoísta y manipuladora y otras veces es todo muy sutil; está disfrazada de la mamá perfecta, aparentemente dócil, amable, dulce, y agradable con todos. Repito como dije antes, que estos patrones de comportamientos en la mayoría de las madres son inconscientes aunque en una minoría son conscientes perfectamente.
La madre sobreprotectora es la típica madre coraje que sobreprotege al hijo o hija desde pequeño. Una castradora nata porque limita todas las capacidades de sus hijos enviándoles la información de “tú no eres capaz solo”, “tú no sirves”, “tú no puedes”, “el mundo es peligroso”, “me necesitas”, entre otros mensajes... Es una mujer manipuladora que se mete en todos los asuntos de sus hijos desde pequeños, y que pretende controlar sus amistades, sus parejas, sus hobbies, sus decisiones y que son tan astutas que normalmente sobornan a sus hijos comprándole regalos, caprichos, dinero, entre otras… para tenerlos medianamente contentos y que a cambio ellos claudiquen sin darse cuenta!!!
Además, son chantajistas emocionales con titulación. Insertan en sus hijos el condenado sentimiento de culpabilidad para que si no le obedecen sus hijos se queden con un mal sabor de boca, aunque estos hayan elegido lo que realmente les hace felices pero el fantasma de mamá y sus ojitos de cordero degollado retumben en sus mentes y al final no puedan disfrutar de su feliz decisión y les reconcoma la culpabilidad de que “por su culpa” mamá está triste.
Son las típicas madres metidas en todo, que a las hijas las castran para que sean sus subordinadas de por vida que tengan problemas para tener pareja porque muchas madres castran a uno de sus hijos o hijas para que las cuiden hasta que se mueran, que si salen a la calle, por la noche de fiesta, quedan con su pareja, salgan de casa con un sentimiento de culpa brutal que les haga boicotearse cualquier ápice de felicidad, y si éstas se sublevan (que muy bien por ellas), lamentablemente al haber tenido una madre tóxica han heredado esa toxicidad por lo que probablemente quieran o no quieran se conviertan en mujeres y madres tóxicas con parejas, hijos, amistades, en general.
Se convertirán en mujeres manipuladoras con sus parejas, que vayan de víctima siempre para conseguir lo que quieren, chantajistas emocionales, y no es de extrañar, ya que han tenido una gran maestra por madre.
Este tipo de madres, tanto las ausentes como la sobreprotectoras crean un grave conflicto emocional a sus hijos o hijas porque estos se dividen entre el “te amo mamá” y el “me asfixias mamá”. Y el miedo, la inseguridad y sobretodo el sentimiento de culpa son emociones reprimidas que gracias a la Bioneuroemoción se pueden liberar,cuando llegamos a la causa y origen de todo.
Porque este tipo de madres fueron hijas y tuvieron una infancia donde probablemente fueron dura y estrictamente educadas, bajo la represión y el dominio paterno/materno, o puede que fueran abandonadas, da igual el extremo, ya que todos los extremos son tóxicos.
Gracias a la comprensión y toma de consciencia de saber de dónde vienen las cosas, de dónde proceden estas conductas y patrones tóxicos se puede “perdonar” más fácilmente a nuestras madres, y si tú al leer este artículo te das cuenta de que eres una madre tóxica apóyate en el amor sincero y verdadero que le tienes a tus hijos para tomar consciencia de tu actitud que inconsciente o conscientemente está haciendo un terrible daño justo a quienes más amas en la vida.
Si este es tu caso deberás perdonarte a ti misma comprendiendo de dónde viene tu toxicidad. Todo esto gracias a la Bioneuroemoción y su análisis de tu Árbol Genealógico, psicoterapia, hipnosis, regresiones, y otras herramientas como constelaciones familiares, entre otros… se puede sanar, solucionar y cortar/liberar de raíz todo ápice de toxicidad.
Este tipo de madres, crean hijos castrados emocionalmente que como dije antes, mientras están bajo su ala las niñas no tendrán novio, o les costará trabajo tenerlo, o su madre influirá y arruinará la relación haciéndole elegir el novio que a ella le guste más (porque crea que es un tipo de yerno al que también puede manipular) y a sus hijos varones les mermará su masculinidad, y creará hombres que serán dominados por parejas como su propia madre o les costará tener novia ya que su madre muy sutilmente y otras veces descaradamente exigirá toda su atención insuflándole culpabilidad al hijo si le presta atención a otra mujer que no sea ella.
Todo un drama, y si esta madre sobreprotectora se queda viuda o soltera, todo se intensifica, ya que detrás de la soberbia y ansia controladora de este tipo de mujeres hay una inseguridad tremenda y harán todo lo posible para que su hijo varón adopte el papel de su marido muerto o masculinizará a su hija para este papel.
¿Qué le pasa a una madre sobreprotectora cuando su hijo o hija se independiza, se muda de casa y aun más cuando se muda a otra ciudad o país? Tremendo conflicto, la madre tóxica en vez de ALEGRARSE Y ACEPTAR LAS DECISIONES DE SUS HIJOS las pone en duda, las juzga, las critica, intenta influenciar de todas las maneras posibles para que su hijo o hija desista. Ellas se tomará estas decisiones como un ataque personal y pobre del yerno o de la nuera porque los va a odiar y puede incluso contaminar las relaciones de pareja de sus hijos y conseguir que dos personas que se aman y son felices rompan por su culpa aunque ella se pondrá en posición de victima para tener la razón.
¿ES SANO QUE UN HIJO O HIJA TENGA UNA RELACIÓN DIARIA CON SU MADRE SIENDO YA ADULTOS, INDEPENDIZADO Y CON SU PROPIA FAMILIA? NO, es sano, esta actitud fomenta la toxicidad y el drama sin motivo. Somos la única especie animal que sigue tomando leche y lácteos después de alcanzar la etapa de madurez, tomemos consciencia, para que exista crecimiento y evolución, el ser humano debe “destetarse” de su madre (o personas, parejas, entre otros.. que hagan de mami), porque quien aun “mama” sigue siendo bebé, es decir, un adulto pero inmaduro emocional.
No quiere decir que le tengas que decir a tu madre “Adiós” y no verla más. Se trata de cortar el lazo tóxico, el cordón umbilical. Ahora eres un hombre o mujer adulto, y vivas aun o no con tu madre te debes y TE MERECES independizarte emocionalmente de ella, para quien viva tu vida y tomes tus decisiones en base a tu felicidad seas tú y no ella!!!! Y si además te has ido de casa, te has mudado y tienes pareja o la quieres tener debes comprender que ahora tu madre es secundario y tu prioridad eres tú y la construcción de tu familia. Estar pendiente de ti misma, tu pareja, hijos, casa, hogar, es tu máxima prioridad. Porque si esto lo dejas de lado y pones a tu madre como prioridad vas a perderlo todo, te lo aseguro, y no es que ella lo arruine sino que tú vas a ser el responsable de consentirlo.
Puedes conversar por teléfono con ella un rato por varios días, salvo si está puntualmente enferma que requiera un poco más de tu atención pero recuerda que existen madres tóxicas enfermas. De hecho todas las personas con enfermedades largas, crónicas y degenerativas son tóxicas y egoístas porque inconscientemente exigen muchísima atención y dedicación y te hacen sentir culpabilidad si no las atiendes.
Simplemente toma consciencia de que como buen hijo o hija ya has hecho tu parte, y que de tus 24 horas puedes dedicar un rato pero el máximo tiempo debes dedicártelo a ti, porque si no estarás dejando de vivir para que ella viva, estarás dejando de prestarle atención a tu pareja, hijos, trabajo, amistades, ocio, tu propio descanso… y tu vida se desmoronará y luego te preguntarás el por qué.
No es normal que un hijo varón vea a su madre todos los días. Esto díselo tú a una madre tóxica y montará en cólera. Pero es cierto. Si tu madre te ama de verdad querrá lo mejor para ti, tu autonomía, tu libertad, tu independencia, y te hará un hombre libre y feliz, en vez de un esclavo. Y este hijo libre y feliz quizá no vaya a ver a su madre todos los días pero cuando vaya lo hará con una sonrisa de oreja a oreja y no obligado para evitar sentirse culpable.
Con una hija hembra pasa lo mismo, lo que pasa es que al ser mujeres quizá hablen un poco más por cuestiones domésticas pero sin sobrepasar el límite tolerable porque si no, esa hija jamás madurará de verdad ni sabrá enfrentarse sola a las circunstancias como mujer adulta ni sabrá tomar sus propias decisiones.
Si crees que tienes una madre tóxica y quieres que tu relación de pareja funcione y seáis muy felices reúne lo justo a tu madre y a tu pareja. Y me da igual que te suene frío o exagerado. Si metes a tu madre (y padre, pero sobretodo esto pasa con las madres u padres con rol femenino), todo el día hasta en la sopa con tu pareja empezarán los problemas. Criticará su forma de ser, la vida, el trabajo, cómo trata y educa a tus hijos, eas cosas… Se meterá en cosas de pareja. Tu mujer o tu marido se sentirán invadidos por ella, y ésta te manipulará sutilmente para ser ella la pobre víctima y ellos los malos de la película.
¿Cómo solucionar esto? Es muy fácil. Simplemente ponle límites. Es decir, a la primera invasión o comentario imprudente la cortas en seco, con cariño pero asertivamente y sin pestañear. Mamá esta es mi novia/novio/esposa/marido y es la persona a la que he elegido para compartir mi vida porque soy muy feliz junto a él/ella. No te consiento que invadas nuestro espacio ni que lo/la critiques porque me parece una falta grave de respeto. Si me quieres de verdad, si me amas como a tu hijo o hija que soy, respétanos y alégrate por nuestra felicidad. Déjanos cometer nuestros propios aciertos y errores, como tú cometiste los tuyos cuando eras joven.
Hay hijos que siendo conscientes de las artes manipuladoras y tóxicas de sus madres lo permiten porque si no se sienten culpables por ello. Si un padre o una madre se aprovecha del amor y de la debilidad y dependencia de su hijo/a está siendo terriblemente egoísta y está destruyendo a lo que más quiere en el mundo, sus hijos porque les crea mayor dependencia y sentimiento de culpa.
No es de extrañar que muchos hermanos se vayan a vivir fuera de la ciudad, esto sucede cuando han tenido una madre tóxica (y/o padre). El concepto “madre” tiene relación con la Tierra, con el lugar donde nos asentamos y elegimos vivir. Una persona que está cambiándose constantemente de casa o ciudad es porque tiene un trauma o conflicto escondido con su madre, aunque venga de cuando era pequeñito, pero está ahí, latente aun. Y un hijo o hija que se compre o alquile una casa en la puerta de al lado de la de su madre ni os cuento la dependencia emocional que tiene con ella, algo que a corto, mediano y largo plazo fastidiará su vida, matrimonio, hijos, vida.
¿HAY QUE CORTAR TODO VÍNCULO SI SE TIENE UNA MADRE TÓXICA? Por mucho que huyas físicamente de ella la toxicidad está en tu mente y te acompañará donde vayas. El lazo que has de cortar primero es el emocional. Esto en una sesión de Bioneuroemoción y con una buena hipnosis se corta, libera y sana de raíz. Después tú tendrás que valorar con ayuda del terapeuta según tu caso, si hay que alejarse un poco también físicamente de ella. No se trata de borrarla del mapa. Quizá ella haya actuado así inconscientemente e ignorase el daño que te hacía. Si existe posibilidad de hablarlo con ella es bueno ponerle límites saludables y si no, pues sencillamente comienza a mirar más por ti, por tu vida, por tu casa, pareja, hijos, trabajo, amigos; y ese tiempo en exceso que pasabas con ella usarlo en otras áreas de tu vida. Si antes ibas todos los días a verla o la llamabas todos los días corta el grifo, hazlo menos. Y recuerda que no se trata de abandonar a nadie sino de dejar de abandonarte tú y tu vida, volver a ti, ser tú, vivir tu vida y no la de ella. Puedes tener una relación sana con tu madre, llamarla, ir a verla, incluso si está fallecida se puede tratar igualmente con Bioneuroemoción. Se trata de cortar y eliminar la toxicidad de vuestra relación y que podáis relacionaros equilibradamente de una forma saludable y bonita.
En resumen, un hijo o hija que tenga una madre tóxica va a tener una relación amor-odio con ella y una dependencia emocional-rechazo con ella y atención: con sus dobles. En Bioneuroemoción al analizar el Árbol Genealógico podemos saber si eres doble de tu madre o de tu padre (o de otros familiares). Ser doble quiere decir tener patrones de conducta similares, similitudes, cargas emocionales parecidas, incluso enfermedades.
Pero ser doble de alguien para nuestro inconsciente es como ser "hermanos simbólicos" lo cual indica que en tu Árbol Genealógico en algún punto pasado hubo un incesto real y los herederos de esos incestos lo suelen vivir de forma real o simbólica repitiendo los mismos dramas afectivos con otras personas. El hijo o hija que es doble de uno de sus padres está en "complejo de Edipo" o en "complejo de Electra", es decir en un incesto simbólico lo cuál ya de entrada el Árbol Genealógico nos cuenta que existe una toxicidad entre estas dos personas. Padre/madre con hijo/hija.
El primer enamoramiento simbólico de un bebé niño es de su madre porque es la primera mujer del sexo opuesto con la que interacciona (salvo excepciones como que la madre tenga un rol masculino o el padre femenino), y el primer enamoramiento simbólico del bebé niña es de su padre (salvo las misma excepción es). Si en la infancia el niño o niña percibe abandono real de sus padres (muerte, abandono, cosas así...) o simbólico (que enferme uno de sus padres, que tenga que ausentarse de casa por trabajo, que rechace al bebé, entre otros) ese niño o niña va a crecer con una carencia emocional que aunque después se subsane ese impacto emocional en la infancia vivido como un abandono va a condicionar el tipo de parejas que conformará de adulto/a repitiendo la misma relación simbólica con su padre o madre ya sea siendo muy dependiente o rechazándolo o amor-odio... Posiblemente somaticen conflictos emocionales de relación y contacto, desvalorización, abandono... Que según la intensidad pueden dar la cara con ciertas enfermedades o dolencias.
¿Se puede ser feliz con una pareja doble de papá o mamá? Por supuesto. Pero si notas conflictos con tu pareja o a la hora de emparejarte debes prestar atención al tipo de pareja que te gustan y si eres doble de tu madre y/o padre y tiene una madre (o padre) tóxica/o posiblemente estés repitiendo traumas infantiles incluso traumas heredados de tu Árbol Genealógico de otros ancestros y con BIONEUROEMOCIÓN es muy sencillo detectar todo este enjambre y sanarlo/solucionarlo para que tus relaciones afectivas mejoren y sean felices, abundantes, sin dependencias emocionales tóxicas, sanado la relación que tuviste con tus padres que ya estén vivos o muertos.
¿Por qué hablamos generalizando de madres toxicas y no de padres tóxicos? Porque la madre desarrolla con el bebé un vínculo muy fuerte e intenso. Ella es la transmisora de todo. El bebé en el útero de su madre absorbe sus miedos, sus culpabilidades, sus expectativas, las alegrías y los conflictos que pueda tener con su pareja.
Y recuerda que quien tiene una madre tóxica ha heredado de alguna forma esa toxicidad. Revisa si tú también te has convertido en una madre tóxica porque a veces lo que más detestamos de nuestra madre sin darnos cuenta en eso nos convertimos o rechazamos la maternidad sin saber por qué. Cualquier extremos es perjudicial. Prueba la Bioneuroemoción y mejora tu vida en todos los sentidos.
Fotografía: cortesía de https://mejorconsalud.com/4-aspectos-no-te-hacen-una-mala-madre/
excelente trabajo, te felicito
Gracias José, muy amable
Wow, increíble de lo que podemos darnos cuenta leyendo información tan valiosa como la que has publicado.