Hace unos días el sitio web del diccionario Merriam-Webster publicó un interesantísimo artículo sobre palabras del inglés que eran usadas hoy día con significados que diferían con los de sus raíces en el latín, como triumph, ovation o consul. En el caso particular de estas tres, sus versiones en español comparten los mismos significados, o sea, son cognados.
El objetivo del artículo es una crítica hacia quienes argumentan que el uso de la palabra decimate como "arrasar", "destruir", "eliminar" y similares es incorrecto debido a que dista de su significado original que viene del latín, el cual quiere decir "separar o eliminar una cosa de cada diez". Su uso moderno es el más usado, mientras que su significado original ha caído en desuso (así como su equivalente "decimar" en el español). Quienes argumentan en contra de diccionarios como el Merriam-Webster dicen que, aunque el significado popular está bastante extendido, sigue siendo un mal uso de la palabra y, por consiguiente, un error... Un momento para respirar.
El prescriptivismo de estas declaraciones se basa en que el lenguaje (sea cual sea) debe ser protegido. Su integridad debe ser defendida de los ataques indiscriminados de los malhablados sin educación. Sin embargo, seguir este camino es ignorar la historia de la humanidad. El inglés (así como el español y muchísimos otros idiomas) han evolucionado y cambiado drásticamente. Idiomas como el español nacían como deformaciones del latín por parte del vulgo, así como por cierto tiempo el inglés era una lengua vulgar en la misma Inglaterra, mientras que la clase alta hablaba francés.
El lenguaje no es una ley natural. No es una criatura esperando por ser estudiada biológicamente. No es un fenómeno natural esperando a un físico para que le estudie. El lenguaje es un fenómeno social. Es la sociedad quien lo construyó, quien lo ha hecho cambiar y quien lo seguirá cambiando según el uso que le den y el contexto en el cual es empleado. Así de simple. Reglas tan básicas del inglés como siempre escribir el pronombre en primera persona del singular "I" en letra mayúscula solo "porque sí" fueron reglas creadas por la misma gente (escritores, pero eso es tema para otro momento). Dicha regla, por ejemplo, fue promocionada, usada por la gente y luego terminó convirtiendo en norma. El lenguaje es una convención y las convenciones cambian. Siempre han cambiado y esas palabras que tú como prescriptivista estás defendiendo no son más que deformidades y "errores" cometidos otrora. No hay integridad que defender. Ya seas lingüísta o entusiasta del lenguaje, nuestro objetivo es velar por conocer el constantemente cambiante estado del lenguaje, no forzar nuestras ideas preconcebidas del mismo.
Les recomiendo chequen el artículo de Merriam-Webster donde verán cómo estos significados (de palabras que también usamos en el español) han cambiado drásticamente su significado.
"Etimología" no es lo mismo que "significado".