Los pueblos tienden a repetir su historia, pero también es cierto que algunos aprenden de sus errores. Me complace ver qué luego de las crisis experimentadas hace tres décadas, este hermoso país experimenta un crecimiento económico que lo ubica, en las expectativas de los más entendidos, como el país de mayor crecimiento previsto para Latinoamérica. Los 2.7 de crecimiento durante el 2017, no son nada despreciables. Todo ello debería implicar una mejora de las variables de condiciones de vida, lo que no necesariamente está sucediendo.
El reto es transformar ese crecimiento, en mayor bienestar de sus pobladores. La búsqueda de mejores oportunidades laborales, ha llevado a un aumento drástico de la población rural , hacia la Mega ciudad de Lima, la cual ya supera los 10 millones de habitantes, con todo lo que ello implica en cuanto a servicios de transporte, salud y educación que deben ser brindados a estos ciudadanos.
Un nuevo reto se suma, el cual es ocasionado por a masiva inmigración venezolana, quienes buscan las facilidades migratorias que el gobierno actual ofrece. ACNUR estima que ya se encuentran alrededor de 100 mil Venezolanos en este pais, lo cual genera una presión adicional sobre todo enLima.
El enorme potencial turístico que tiene este gran país, ya ha sido tomado en cuenta, ubicandolo al puesto 51 de competitividad en materia turistica en el año 2016. Para ese año, este sector generó mas de 7 mil millones de $, casi un 4% del PIB nacional.