El verbo emprender significa “empezar a hacer una cosa determinada, en especial cuando exige esfuerzo o trabajo o cuando tiene cierta importancia o envergadura”, existen varios tipos de emprendedores, pero en el que nos vamos a enfocar son aquellas personas que desean emprender un negocio, pero que se ven estancados a realizarlos por un motivo particular: el miedo.
Si te das cuenta, todos somos emprendedores innatos, pues todos alguna vez en nuestras vidas hemos realizado algún proyecto para llegar a una meta que nos beneficiara en ciertas circunstancias, ya sea escolar, deportivo, social, emocional y el más famoso de todos: económico.
El miedo se trata de una alteración del ánimo que produce angustia ante un peligro o un eventual perjuicio, ya sea producto de la imaginación o propio de la realidad, su función principal es prevenir o protegernos de algo, como es la muerte, el dolor, etcétera.
El miedo y el emprendimiento son acciones naturales, así como es respirar, ahora debes tener presente que el miedo no es malo, una emoción que existe para protegernos y mantenernos vivos, no es algo que debamos odiar o dejar de sentirlo, pero entonces, ¿Por qué el miedo si es algo bueno, nos impide emprender?
Aquí te van 5 consejos para emprender negocios a pesar de tener miedo:
1.- Anota tus miedos cuando sepas en que negocio quieres emprender:
Muy lógico ¿no?, anota tus miedos para saber a qué te debes enfrentar.
2.- Redirige tus miedos
Cuando tengas tu lista de miedos, escribe tu miedo más lo que causa ese temor, ejemplo:
“tengo miedo de abrir este negocio porque a mi familia no le parece que sea buena idea”, cuando lo tengas escrito redirige tu miedo que te estanca a un temor que te mueva, utilizando el ejemplo anterior seria de esta manera: “Tengo miedo de no abrir este negocio porque a mi familia no le parece buena idea”. Posiblemente puedas llegar a pensar que dicen lo mismo, pero pon atención que el objetivo de este ejercicio es poner el miedo como aliado, al decir que tienes miedo “a abrir un negocio” es igual a que no lo vas a abrir porque lo que no quieres es que tu familia se enoje, en el caso contrario decir que tienes miedo” a no abrir el negocio” es igual a decir que lo vas a abrir a pesar de que tu familia se enoje porque tu temor es no abrirlo por culpa de ellos.
Y así te puedo dar varios ejemplos:
“Tengo miedo de dejar mi empleo por poner un negocio”
Redirigido: “Tengo miedo de no poner mi negocio por no dejar mi empleo”
Mientras uno te estanca a no dejar tu empleo, el otro te hace dejarlo.“Tengo miedo de que mi negocio no me de dinero porque sea una mala idea”
Redirigido: “Tengo miedo de no lograr que mi negocio me de dinero por no hacerlo buena idea”
Mientras uno te hace darte por vencido absolutamente, el otro de obliga a moverte a mantener tus ideales y lograr tu objetivo.
No es necesario que las frases coincidan intercambiando los predicados y los sujetos, lo que tienes que lograr que es tus miedos sean tus motivos de movimiento.
- Ejemplo: “Tengo miedo a perder lo que tengo por poner un negocio”
Redirigido: “Tengo miedo a no ganar por no poner un negocio”
OJO: *Una manera de redirigir tur miedos, es pensar lo contrario de ese temor, mientras unos pueden pensar en lo que pasaría si lo hicieran, tu puedes pensar en lo que no pasaría si no lo hicieras con el fin de motivarte.
** “Que tus miedos sean tu motor, no tu freno”. **
3.- Domina tus miedos: CONOCE TODO SOBRE TU NEGOCIO.
El miedo protege a las personas del peligro, pero relacionado con los emprendedores los miedos van a enfocados a lo desconocido. Cuando conozcas tus miedos te vas a dar cuenta que tienen algo en común, se basan en la falta de conocimiento: “tienes miedo a que tu negocio no funcione por que no sabes si esos productos le guste a la gente” o “tienes miedo de que no ganes dinero porque tu negocio puede que no pase del año”, si te das cuenta el miedo es “futuro”, cuando logras conocer algo, tienes el poder de la decisión de hacer o no hacer por conveniencia, tu decisión deja en basarse de incertidumbre y se convierte en decisiones objetivas, donde conoces los riesgos y las ganancias y lo aceptas con la responsabilidad debida. Para lograr esto debes conocer todo lo que tenga relación a tu negocio, mientras más conozcas al sector al que se dirige tu negocio, más objetivo serás, y el miedo se reducirá al punto de quedar neutro.
4.- Plan a- b- c- d-… z:
Una buena táctica para controlar los miedos y no desistir, son las alternativas, si una de tus estrategias no funciona debes tener planes de respaldo hasta lograr tu cometido.
5.- No temas si tu negocio va a funcionar o no, porque la respuesta es que, si va a funcionar, solo es cuestión de tiempo:
No dejarse vencer en los primeros problemas que se te presenten, hacer crecer cualquier cosa lleva esfuerzo, pero principalmente lleva tiempo, una combinación que puede ser pesado, pero uniéndolo con el dominio del conocimiento en el sector al que te diriges, no tendrías que preocuparte si tu negocio va a funcionar o no, pues solo tiene que pasar el tiempo para que tus objetivos se concreten. Persiste inteligentemente y vencerás.
Espero que estos consejos logren ayudarte a realizar tu negocio que tantas ganas tienes por emprender, porque:
“No es más valiente aquel que no tiene miedo, sino el que sabe conquistarlo”- Nelson Mandela.
Hasta el próximo post. Éxito para todos.