No hay pastos más verdes

Tiró el bolso en la siguiente silla mientras se sentaba. Cruzando sus piernas cómodamente y recostándose cómodamente. Como la mayoría de las mujeres, ella sabía cómo lucir femenina mientras pretendía ignorar inocentemente su belleza.

"Perdon por haberte hecho esperar. Soy un procrastinador crónico. Siempre tarde ”, anunció con orgullo.

Fue instantáneamente golpeado por ella. Su repentina, inesperada llegada y rápida entrega de diálogo no le dio tiempo para comprender completamente su primera impresión de ella. Parecía una gran chica. Se sentó y miró a su alrededor, obviamente dejando que él la mirara.

"Esto parece un buen lugar. ¿Vienes aqui a menudo?"

"Sí Dyuthi. Por cierto, pensé que me habías visto y me habías ido. Llevaba bastante tiempo esperando.

"Jaja, sí, Mahesh. Ese pensamiento cruzó mi mente. ¡He estado temiendo este encuentro! "Ella siempre expresó ansiedad cuando estaba muy segura de que sabía que le iba a impresionar. De hecho, ella sabía que él ya estaba impresionado, pero ella no lo estaba. Ella no podía expresar negación de interés. Ella lo hizo pasar por la ansiedad y el miedo de reunirse con él para comprarse a sí misma en algún momento para tratar de ver si podía gustarle.

Como en cualquier otra reunión, hablaron, comieron, bebieron y se fueron. Ella se ofreció a pagar, fue holandesa, se rió entre dientes cuando le abrió la puerta y bromeó diciendo que ella no estaba acostumbrada a la caballería. Ninguna niña está acostumbrada a la caballería e incluso las que declaran que no les gusta, no pueden evitar sentirse impresionadas cuando la reciben.

Dyuthi no estaba segura de si siempre había tenido problemas para ser honesta consigo misma o si se esperaba que fuera ella, que no fuera golpeada y actuara como una estupidez. Ella siempre contuvo sus palabras, pero eso no le impidió esperar su llamada ni le impidió conocer a otros posibles novios. No estaba segura de lo que iba a pasar y quería ser inteligente al respecto. ¿O era el Géminis escondido dentro de ella? ¿Constantemente cuidando a su príncipe con una brillante armadura, incluso si ella ya estuviera con una?

Ella declaró que todo fue "bien" y que sus padres podían decidir. A sus amigos, ella les dio detalles detallados sobre su caballería y más particularmente sobre cómo él había sido golpeado por ella. Ella glorificó sus virtudes y minimizó sus impresiones al respecto. Se encontró a sí misma buscando la opinión y la validación de sus amigos, lo que significaba que no se convencía a sí misma, ¿verdad? No parecían muy emocionados, ¿entonces ella estaba cometiendo un error? También se quejó de si le gustaba la forma en que se veía cuando se despertara o si veía los estados de cuenta de su tarjeta de crédito.

La crisis del cuarto de vida trajo cierta madurez, pensó. ¿O fue su inseguridad lo que la hizo adaptarse a cosas que no le hubieran gustado hace algunos años? Ella no estaba segura. Ella extrañaba los primeros años veinte. Extrañaba ser demasiado joven y demasiado estúpida. La espontaneidad de sus gustos y aversiones y las consecuencias que trajo. Hubo lágrimas y risas; tuvo que luchar para asegurarse de que tenía que hacer exactamente lo que quería. Hoy, pocos años después, era libre de hacer cualquier cosa, pero era más fácil con los demás y con ella misma. Hizo muchas cosas que no le gustaron y trabajó y vivió con muchos a quienes toleró por elección sin beneficio propio.

El tintineo de los brazaletes de la niña de las flores la sacudió de su estado pensativo. Neela tenía veinte años. Pero ella parecía más joven. Ella conoció a Dyuthi desde su infancia. Ella acompañaría a su madre a entregar flores en la mañana, después de lo cual su madre la dejaría en la escuela. A primera hora de la tarde, se sentaba cerca de las puertas de los edificios donde su madre iba a hacer un turno por la tarde de lavar los platos en los apartamentos. De vez en cuando se le pedía que se deshiciera de los puntos para aflojar una blusa y recibir una propina. Soñaba con ahorrar todo eso y comprarle un sari a su madre. Le encantaba lo hermosas que se veían algunas chicas. Su tez resplandeciente, sin importar su obesidad o su tono de piel, los hacía lucir más bonitos.

Dyuthi la había molestado por su cara manchada de cúrcuma y talco. Ella dejó de usarlos. Sabía que si tenía champú, su cabello no sería tan grasoso y brillante como las chicas de las casas donde trabajaba su madre. Pero el dinero nunca había sido una restricción, lo que ella le pidiera, su madre la compraría, si su petición era razonable. Miró a Dyuthi y la observó estudiar con una mesa y una taza de té. Parecía muy importante cuando estaba en su computadora portátil y parecía popular cuando paseaba por el balcón de su teléfono.

Un día su madre la maldijo por ser una niña. Ella dijo que no había ninguna diferencia. Su madre dijo que algún día se daría cuenta de por qué era un pecado nacer como una niña. Estaba en conflicto con lo que ella había aprendido en la escuela, ¿era Dowry? ¿Qué era? "No me casaré nunca, si eso te lo hace más fácil", le ofreció a su madre. Su madre negó con la cabeza y dijo: "El matrimonio, en sí. No la parte de la dote ”. Estaba orgullosa de su madre. Ella nunca se quejó a los vecinos y por teléfono a todos como las mujeres en los apartamentos. Lloraría un poco y la regañaría o la golpearía si se interponía en su camino cuando estaba de mal humor. Pero prontoella lo olvidaría y prepararía una buena comida caliente y le diría lo hermosa que es debido a los genes de su madre. Ella era hermosa por cierto. Ella no era gorda como las damas del apartamento. Era delgada y tenía rasgos hermosos. Los saris se envolvían a su alrededor con tanta naturalidad como si estuvieran mejor hechos para ella. Tuvo un día particularmente afortunado ese día, cosió algunos botones y cremalleras, masajeó los pies de los jefes de su madre y también lavó una caja de tiffen con manchas de hongos. La dama le dio una propina de cien rupias y también algunos brazaletes de cristal. Ella había estado recolectando dinero por un tiempo. Estaba cuidando a los niños cuando su madre estaba haciendo su turno de lavado de platos por la tarde. Obtuvo doscientas rupias por mes por un bebé sentado por las noches. Ese día ella fue y decidió comprar un sari para su madre. Ella escogió la más barata. Eran quinientas rupias, en gasa y cómodas para usar como su madre. Era de un tono azul, que a ella le parecía elegante. Se lo presentó a su madre, quien le gritó por malgastar dinero y la amenazó con devolverlo y obtener dinero. Ella pensó que su madre le estaba enseñando el valor del dinero. Se arrepintió de su decisión y decidió que el dinero era precioso y que no debía gastarlo en la frivolidad que no tenía un lugar en su destino. Justo cuando pensó que había aprendido el valor del dinero, su madre murió. Ella se suicidó, dijeron. Ella había consumido insecticida y falleció en su lugar de trabajo. El mundo de Neela llegó a su fin. Fingía que todavía tenía un techo sobre la cabeza, también trabajaría como su madre y lo manejaría. Ella comería menos y trabajaría más para apoyar su educación. No se dio cuenta al no comer y quedarse en casa, todavía necesitaba dinero. Ella no sabía que la hoja de asbesto sobre su cabeza tenía que ser pagada. Su padre tenía otra esposa, ella no estaba segura cuando él se había vuelto a casar. Ella iba a ser una limpiadora y una florista, como su madre. Uno por uno sus sueños fueron rápidamente olvidados. Pero su vida era la misma. Ir todas las mañanas, a cada casa y entregar flores y admirar a las chicas que vivían en un mundo diferente. Yendo a sus casas para después lavar sus platos, fue la misma vida. Pero solo sin los sueños. Dyuthi se acercó a la puerta y recogió las flores para el día y pagó el anticipo para el mes siguiente. Neela le dio algunas flores extra gratis. Ella dijo que una novia debe estar adornada con flores para hacerla más bonita y buscar las bendiciones de Dios. "¿Era guapo, mamá? ¿Qué te dijo él? —Preguntó ella con entusiasmo. "No te preocupes, esta vez, todo va a ser genial". "No sé si me gusta, Neela. No sé si le gusta, supongo que sí, porque me llamó después de que nos conociéramos. "" Por supuesto que le gustarás. Eres perfecta ma Pero no hables mucho. Los hombres hablarán fácilmente y se irán fácilmente también. Tu corazón es puro ma. No te comprometerás fácilmente, pero cuando lo hagas, no eres del tipo de rendirte fácilmente "" Aprendí mis lecciones, Neela. ¿Que pasa contigo? Estás usando tantos brazaletes y flores en estos días. ¿Estás tratando de ser bonita para alguien? "" ¡Oh, Dios mío, no! No puedo Mi tío me prometió casarme con el hijo de su hermano. Lo he visto una vez. Trabaja en un restaurante. —¿Te gusta? ¿Él te habla? "" No conozco a mucha gente. Así que al menos sé quién es "" Espero que te cuide y te ame mucho, Neela "Neela se sonrojó y se fue. Esta fue la mejor parte acerca de casarse, las burlas y la importancia que recibió. Algunos le dieron regalos: ropa, brazaletes, esmaltes de uñas. Ella hizo lo mejor que pudo. No era muy guapo, pero al menos estaba dispuesto a casarse con ella. Él la vio una vez y no le habló. Le debía a su tío algo de dinero que lo hacía obediente. Se sentía segura, casándose con alguien que estaría bajo el control de su tío. Su padre presidiría la boda. Ella lo odiaba a él, a su esposa y a su hijo, pero eso nunca le impidió sentirse emocionada cuando tuvo la oportunidad de conocerlo. Ella no le pertenecía a ella padre. Ella al menos pertenecería a su marido. El matrimonio era todo acerca de la identidad que le daría a ella. Neela recordaba a Dyuthi a los veinte años, hermosa y confiada, incluso condescendiente. Unos pocos años difíciles la habían dejado considerada y suavizada. Era más tolerante que antes, pero bella como siempre. Ella ya no se veía delgada y resplandeciente, pero la calma con respecto a ella se volvió más bella. No era ruidosa y abierta como antes, no era audaz pero era valiente. La antigua admiración de Neela en torno a los celos de Dyuthi ahora se convirtió en empatía y esperanza para Dyuthi. Dyuthi esperó más días por la llamada de Mahesh. Sus padres eran incluso más inseguros que ella. No querían perderla de nuevo en una elección equivocada. A pesar de esperar, cuando él llamó, ella era breve y no comprometía en sus conversaciones. La boda de Neela se acercó y solía venir antes de lo habitual. Ella siempre tenía prisa. Dyuthi estaba feliz de que Neela estaba enamorada, pero ella envidiaba su habilidad para sonreír descuidadamente y sentirse feliz con un resplandor que Apareció en su cara. Dyuthi trató de ser feliz, lucir feliz era el secreto para lucir genial. Dejó que la vida fluyera y soltó las riendas con las que controlaba la dirección de su vida. Se dejó sentir lo que hizo y no lo que quería ser. Ya no le importaba la sociedad y lo que pensaban. No es que ella haya tomado alguna vez una acción basada en la aprobación de la sociedad, pero sí se preocupó por eso. Una vez que decidió, ya no se preocuparía más por eso, se sintió aliviada. La felicidad interna fue subjetiva con respecto a lo que decidimos hacer las paces. ¿Amor? ¿O pareciendo estar enamorado? Cuando se encontraron por cuarta vez, Mahesh ya sabía que estaba caminando sobre cáscaras de huevo. Tenía poco tiempo antes de poder transmitir su respuesta a su madre. Quería evaluar su interés primero. "Entonces, ¿qué dicen tus padres?" "¿Sobre qué, Mahesh?" Sobre tu vida, tu boda, etc. "" Oh, es totalmente mi elección "" ¿Y tu elección es? "" Me gustaría decir lo que dicen "" Jaja. Va en círculos. La primera vez que nos reunimos, dijiste que lo dejarías a tus padres por completo y que tu elección no tiene importancia "." Todavía es algo así "" Está bien. Independientemente de su elección, estoy de acuerdo en que tendrán una decisión que será vinculante para usted. Pero estoy seguro de que todavía tienes una opción, por muy inútil que sea. Me gustaría saber eso "." No he pensado así Mahesh. Solo estoy llegando a ti como persona "Pensó que ella nunca iba a bajar la guardia; él tampoco tenía interés en expresar sus sentimientos por ella. "Déjame decirlo de esta manera, asumiendo que tus padres tomen la decisión de seguir adelante conmigo, ¿estás de acuerdo?" "Sí". para ser para cualquier persona que decidan, es "no realmente", se rió y soltó su insistencia. "Eso me hace muy feliz de saber. Al menos yo soy preseleccionado. "" ¿Y tú, Mahesh? ""

La elección no es solo mía, sino de ella también. "" Oh, está bien. ¿Qué están diciendo tus padres? Bueno, no son ellos. La elección es mía y de la niña. Sobre todo si le gusto, me casaría con ella. "" Y eso será para cualquier chica que esté dispuesta a casarse contigo, ¿verdad? "" En realidad no ".