The genetics of my thoughts.

La genética de mis pensamientos.

Las mujeres primero que nada queremos vivir sin miedo.
Isabel Allende.

Ayer de camino al trabajo coincidí de forma casual con algunas mujeres que iban manejando motores de triciclos eléctricos muy utilizados hoy en día para el transporte de mercancías y el movimiento de personas de un lugar a otro.
La mayoría eran jóvenes de menos de 40 años, y ello me resultó bastante agradable, porque denota la libertad mental y evolutiva con la cual las mujeres vamos enfrentando los retos comunes de nuestra sociedad subdesarrollada y prejuiciosa.Sin embargo, si lo hubiese hecho en mi época de juventud me hubieran tildado de marimacha.😂

Absurdo, ¿verdad?

Pero lo peor es que los más rígidos y celosos jueces hubiesen sido las mismas mujeres que velaban por mantener una conducta social acorde con sus reglas y costumbres sumisas, y que además, aprobaban los hombres en su afán de mantener su supremacía.

Ignoramos nuestra verdadera estatura hasta que nos ponemos de pie.
Emily Dickinson

Parecería que estoy hablando del comportamiento de una manada de animales, ¿Cuál para comparar?
Déjame ver: ¿leones? ¿elefantes? ¿hienas? ¿orcas? ¿abejas? ¿suricatas?
No, déjame explicarte que éstas especies tienen establecido un matriarcado super profesional que les ha permitido evolucionar y subsistir, y sí, los animales se someten al dominio femenino de manera extraordinaria.

Pero nosotros somos descendientes de los simios que establecieron jerarquías por tamaños y griterías.De esa manera se transmitió genéticamente la leyenda del macho alfa que se transformó en el patriarcado de toda la vida.

Para la mayor parte de la historia, anónimo, era una Mujer.
Virginia Woolf

Recuerdo muy bien un profesor de biología, durante unas clases acaloradas, convenciéndonos que el género más bello entre todas las especies de animales era por supuesto, el masculino, más que nada por sus dobles proporciones morfológicas en comparación con una hembra.Tal vez, en muchos casos tenía razón, pero sí hubiera recordado el dimorfismo sexual femenino que ocurre en la naturaleza animal, jamás hubiera reconocido que una ballena hembra es más hermosa y grande que un ballenon macho.

El hecho es que la mujer acepta la evolución, hace uso de ella y obliga a evolucionar al hombre, porque evidentemente eso se traduce en libertad e independencia, será por eso que se han incrementado las cifras de féminas que prefieren vivir solas por estos últimos tiempos, y se niegan a arrastrar con un abejón vago y sonso que cree que aún vive bajo la saya cómoda de su mamá.

Algunas mujeres eligen seguir a los hombres, otras deciden seguir sus sueños.
Lady Gaga.

En serio, sin fanfarronería, solo escribo cosas que se me ocurren, locuras tontas por las que puedo ser mal juzgada, pero no me importa... sé que nosotras solo queremos ser iguales, no por maldad, sino con una voluntad necesaria para sobrevivir, evolucionar, y mejorar eficientemente nuestra propia competencia como género humano.

Casualmente, por estos ultimos 6 días, en los que he vivido en obscuridad total, producto de una tormenta tropical que ni siquiera pasó por mi provincia, pero que nos desconectó del sistema energético nacional, encontré algún tipo de consuelo, leyendo interesantes voces femeninas de mi país, que comenzaron como una tenue y cálida luz, y hoy, brillan dentro de tanta oscuridad senil, generacional y patriarcal que me impresionan.

Lástima que se les considere igual que a los libros apócrifos de la Biblia.
¡¡Ridículos!!

_{A veces solo quiero divagar y divagar para esconderme de los días turbios que nos acompañan, pero perder la motivación por la vida sería algo poco factible para un ser repleto de billones de células vivas, que solo con el reflejo de la luz solar te llenan de una increíble energía tibia y contagiosa.Somos seres vivos, y nos encanta ese calor a pesar de no tener clorofila.}

Nuestra mentalidad femenina no ha dejado de creer que nos tratan aún como individuos subalternos en algunos grupos o sociedades, y aunque parezca lo contrario, el problema aún persiste mientras nos apreciemos como apéndices obligados de los hombres, y no como pares indispensables uno del otro.

Yo no deseo que las mujeres tengan poder sobre los hombres, sino sobre ellas mismas.
Mary Wollstonecraft

Pensar, actuar y vivir con libertad no debería estar supeditado a las leyes y comportamientos aprobados por el género masculino, porque las mujeres podemos llegar a ser tan poderosamente masculinas, como irresistiblemente femeninos pueden llegar a ser los hombres.

_{Perdón por tan pocas fotos, estoy en la cama disfrutando de una pandemia tropical que no debería faltar para cerrar otro ciclo.🥺}